Iglesia de la Santa Cruz

Desde el siglo XVII ya existía en estos lugares de Higa una ermita dedicada a la Vera Cruz. No será hasta 1746 cuando los vecinos pidan un solar, en otra ubicación diferente a la anterior, para construir un nuevo recinto de mayores proporciones. En 1766 se bendice este nuevo templo de una sola nave con presbiterio destacado y sacristía en el costado sur.

En su interior preside la Santa Cruz, un antiguo madero que cuenta la tradición que se le apareció a un jinete en el barranco conocido como de la Raya. Además, se conservan interesantes esculturas y pinturas, entre ellas la devota imagen de Nuestra Señora de las Mercedes.

Entre las festividades destacan la Invención de la Santa Cruz, el dos y tres de mayo, y el mes de septiembre, con los festejos en honor a la Virgen de las Mercedes.

Desde 1929 obtiene el rango de parroquia, estando presidida por el Santo Madero y Nuestra Señora de las Mercedes, obra anónima del siglo XVIII y transformada en la siguiente centuria.

Otras obras no carentes de mérito artístico se conservan en el recinto, como las imágenes de San José, San Bernardo, San Antonio de Padua o Santo Tomás de Villanueva.

El patrimonio pictórico se centra en dos lienzos de gusto barroco del Cristo Difunto y de Santo Domingo de Guzmán.